Más molestias y dolencias en bici

En el ultimo post que publicamos, estuvimos hablando de las molestias y las dolencias en la bicicleta. Pues bine, hoy os volvemos a traer algunas más para que podáis vigilaros de pies a cabeza, eso sí, con el seguro de ciclista siempre.

  • Tendinitis de los Isquiotibiales.

La tendinitis de los Isquiotibiales es una lesión que pocas veces se puede apreciar ya que el proceso de inflamación no es muy evidente por lo que en muchas ocasiones no se habla de tendinitis. La tendinitis puede aparecer con el sobreuso.

¿Cómo podremos identificar los síntomas de una tendinitis de Isquiotibiales? En primer lugar, el primer síntoma es la tirantez del músculo que por lo tanto provoca el dolor en la parte posterior de la rodilla.

Una de las posibles ayudas que nos puede venir bien es bajar la altura del sillín, en este caso y adelantarlo al mismo tiempo que así ayudan a reducir la tensión a la que está sometida el músculo.

¿Qué tratamiento podemos seguir? Primero, que los talones no caigan de los pedales, es decir, que no se encuentren forzados ya que el músculo se encuentra más en tensión, sobre todo cuando realicemos en grandes desarrollos y potenciar los músculos para evitar decaimiento frente al cuádriceps.

  • Tendinitis del tendón de Aquiles.

El tendón de Aquiles es el tendón que tenemos en la parte del talón que entra en juego al caminar, saltar o correr. Además es el encargado de conectar los dos grandes músculos que impulsan la fuerza necesaria para realizar el movimiento ya que son los encargados de impulsar los pies.

El dolor del talón normalmente viene creado por una sobrecarga del mismo y se manifiesta con más asiduidad en personas jóvenes que normalmente correr, caminan o que son atletas.

Algunas de las causas que provocan una tendinitis del tendón de Aquiles son:

  • Incremento de la actividad realizada o de la intensidad.
  • Utilización de calzado erróneo.
  • Rotación hacia dentro o hacia fuera del pie

ETC

Cómo hemos indicado con anterioridad, los síntomas que nos puede alertar de sufrir una sobrecarga o tendinitis del propio talón son molestias o dolor tanto en la práctica de ejercicio como en la exploración. A primera hora de la mañana puede causar un mayor dolor pero con el paso del tiempo y el movimiento puede ir desapareciendo.

Podemos prevenir su aparición vigilando la posición que toma el pie con respecto al pedal y sobretodo, cuando nos enfrentemos a pendientes con alta exigencia, retrasar el pie del pedal con respecto al eje.

¿Qué tratamiento podemos llevar para que no aparezca tal lesión o podamos disminuirla? La aparición de la tendinitis en el tendón de Aquiles es más fácil que la sufran aquellas personas que tienen una disimetría en sus extremidades, es decir, que la pierna más corta de la persona tiene mayor posibilidad de padecerla. Tenemos que prestar una atención concreta si vamos a realizar un cambio de calzado o un cambio en los pedales para ir adaptándonos a ellos.

  • Tendinitis de la banda Iliotibial.

La manifestación de dolores en la parte externa de la rodilla puede ser uno de los síntomas de la tendinitis de la banda Iliotibial, una posible lesión por un sobreesfuerzo de los tejidos blandos en la zona anteriormente comentada. La banda Iliotibial es una banda gruesa del tejido blando fibroso que va desde la cadera hacia abajo por la parte externa del muslo y que se introduce en la tibia.

La banda es decisiva en la estabilización de la rodilla, desplazándose desde la parte posterior del fémur a la parte anterior durante la pedaleada. Ocasionalmente, la banda se inflama y causa dolor, una de las principales causas del dolor en corredores y ciclistas.

Para prevenir este tipo de lesiones, debemos de evitar el uso de sillines elevados y por lo tanto el tratamiento que podríamos seguir es, en primer lugar, corregir como hemos indicado la altura del sillín y la posición. Además, deberíamos evitar realizar entrenamientos continuados en cuestas duras así como realizar estiramientos previos al entrenamiento.

  • Dolor de cuello.

Ir en bicicleta no debe de causarnos ninguna molestia pero sí que es cierto que al estar mucho tiempo sobre una bici, podemos sentir alguna que otra molestia que a pesar de tener nuestro seguro de bicicleta, es normal.

Una de las principales causas de estar un tiempo excesivo sobre la bici, es dolor de cuello debido a tener la bici mal ajustada, es decir, es posible que el manubrio se encuentre demasiado bajo o demasiado lejos para nuestra posición y por lo que te ves forzado a extender el cuello. Otra de las posibles causas es el casco que utilizamos, por ello invertir en un buen casco es tan importante como saber que es el correcto ya que depende el ciclismo que realicemos la visera del casco puede o no molestarnos, por ejemplo, en ciclistas de ruta que la posición es más baja, la visera nos impide ver correctamente y tensamos demasiado el cuello para poder ver.

Debido a la posición que adapta el ciclista a la hora de pedalear, con la mirada al frente de manera fija, se produce una serie de contracciones en los músculos que se encuentran situados en la nuca y los hombros que provocan una extensión de gran amplitud y genera una sobrecarga por el sobreesfuerzo, principal causa de la cervicalgia o conocida normalmente como dolor de cuello.

Para prevenir esta serie de molestias y dolores debemos de no sobrecargas o sobreesforzar nuestros músculos, es decir repartir equitativamente el peso con una gran parte d este sobre el sillín y una pequeña parte sobre el manillar, y cuando el sillín no se encuentra en su posición correcta este peso no se equilibra de esta forma y es cuando se produce el sobreesfuerzo.

¿Cómo podemos evitar esta serie de molestias originadas por la práctica de la bicicleta? En primer lugar debemos de estirar perfectamente y sin olvidarnos de ninguno de nuestros músculos y una vez que vayamos sobre la bicicleta, cambiar la posición de las manos, realizar estiramientos hacia un lado y al otro del cuello…

  • Lumbalgia.

Igual que la dolencia anteriormente comentada, la lumbalgia es otro de los efectos que tiene estar mucho tiempo sobre una bici ya que una mala práctica (mala postura) nos puede provocar una serie de lesiones importantes.

A pesar de que el uso de la bicicleta se indica para realizar rehabilitación, una mala postura o una sobrecarga en la columna vertebral puede provocar situaciones irregulares que derivan en dolor.

Podemos prevenir toda esta serie de molestias y dolores colocando el sillín en la posición correcta con respecto a nosotros, pues si está demasiado alto, puede generar una hiperextensión de la zona lumbar. Tampoco podemos desarrollar una postura demasiado recta y, aunque al principio puede aliviarnos, puede provocar una comprensión de los discos que originan lumbalgia.

Pues aquí termina todo amigos, esperemos que todo lo que os hemos comentado os ayude a reconocer si tenéis algunas molestias y podáis solucionarlas, para todo lo demás, los seguros de bicicletas.