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Bicicletas y perros: Cani – bike

Con el buen tiempo apetece más salir a pasear, pero si tenéis bicicleta y perro, es difícil elegir con quién salir ¿verdad? Pues ya existe una nueva modalidad de ciclismo: Cani – Bike. Se trata de pasear en bici con tu perro atado a un arnés especial rígido para que corra al lado nuestro sin engancharse. Esta es una buena solución. En este post os vamos a mostrar las claves para practicar bien el Cani – Bike y que nuestro perro participe con nosotros haciendo deporte, que también será beneficioso para él.

Antes de nada, lo primero es saber que nuestro animal no tiene ninguna enfermedad que le impida realizar cualquier actividad física. Vuestro veterinario le puede hacer un reconocimiento para comprobar que esté en perfecto estado de salud.

Realizar el Cani – Bike precisa de paciencia ya que puede llevar un tiempo hasta que nuestro perro se acostumbre a la bicicleta. Además no todas las razas tienen la misma habilidad y resistencia a la hora de hacer ciclismo a nuestro lado.

Es conveniente dejar al perro que olisquee la bicicleta para que se haga a ella y coja confianza sin obligarle.

Cuando comencemos a pasear con nuestro perro y la bici los primeros paseos deberán recorrer distancias cortas debiendo corregirle para que no se distraiga. Para que el perro se vaya adaptando debemos ir alargando la distancia de paseo paulatinamente.

Además, es recomendable hacer paradas cada poco tiempo para que el perro descanse y, en esas paradas, es imprescindible darle agua para que se hidrate, al igual que debemos hacerlo nosotros. Podéis llevar una botella para ellos o enseñarles a beber de nuestra mano o del chorro de la botella.

Para que el perro disfrute del paseo sería ideal que no haya comido nada ni dos horas antes de realizar la actividad física ni dejarle comer una hora después de haberla realizado.
Por otro lado, para que el perro vaya seguro al lado de la bici, debemos atarlo con un arnés especial rígido, ya que las correas convencionales se pueden enredar en cualquier sitio y provocarle daño al animal. Hay muchos tipos de adaptadores especiales para bici en el mercado. Se trata de soportes que van sujetos a la barra central o al sillín y llevan un muelle, manteniendo al perro a una distancia suficiente para que no se cruce entre las ruedas y los tirones sean amortiguados.

Los adaptadores más comunes son:

1) Springer: sistema de sujeción rígido que mantiene a tu perro al lado de la bicicleta en una posición correcta, cómoda, firme y segura.

2) Walky Dog: se trata de una barra rígida con un muelle que absorbe cualquier tirón que nos pueda dar nuestro perro, y así podremos pasear con él sin que ocurran accidentes. Se puede colocar tanto enganchado en el sillín como en el cierre rápido de la rueda trasera de nuestra bici.

3) Bike Tow Leash: que es una barra semirígida que se incorpora en la rueda trasera de la bici y funciona como los anteriores.

4) Por último, si nuestro perro es pequeño, pero aún así queremos pasear con él, podemos poner una cesta de paseo en nuestra bici o un remolque. Hay muchos tipos en el mercado.

Cuando practicamos deporte con nuestro perro, es imprescindible que éste esté sano. Para ello debemos llevarlo a un veterinario y hacerle un reconocimiento. Pero, en caso de que suceda algún percance en el paseo que perjudique a nuestro amigo perruno, debemos tener un seguro que cubra las facturas del veterinario, que si vamos a urgencias pueden hasta duplicarse los costes. En Micompi podéis comparar precios de las mejores aseguradoras y elegir el que más se ajuste a vuestras necesidades al mejor precio garantizado. Además, estaréis donando 1€ a una protectora de animales con cada contratación.

Si viajamos seguros, vamos más tranquilos. Ahora podemos contratar un seguro tanto para nosotros, que vamos en bici, como para nuestros perros, que nos acompañan en el paseo. Ya podemos disfrutar de nuestras dos pasiones a la vez.