Hoy desde nuestro comparador de seguros de bicicletas queremos hablar de un término del que seguramente habréis oído hablar “drafting” o “ir a rueda” relacionado con el mundo del ciclismo, o también conocido como “rebufo” en el mundo del automovilismo.
El drafting en el ciclismo se produce cuando un ciclista se coloca detrás de otro a una distancia muy próxima, con el objetivo de aprovechar la succión generada por el ciclista que va delante, generando así una menor resistencia de avance, ya que el primer ciclista corta el viento al segundo. Esto hace que el que va detrás pueda generar más velocidad o un esfuerzo menor llevando la misma velocidad que el de delante.
Esta práctica se suele realizar en carreras ciclistas, pruebas contrarreloj o en triatlón, en la parte de ciclismo. Aunque en esta última no siempre está permitido, solo en algunos triatlones populares, pero está prohibido en distancias largas o Ironman.
Es una técnica que muchas personas desconocen y que se puede emplear también en las salidas diarias, rutas, escapadas en bici, etc.
El ciclismo es un deporte en el que hay que luchar contra tres resistencias: la fuerza gravitatoria, fuerza aerodinámica y el rozamiento. Cada una dependerá del terreno por el que vayamos, pero el drafting nos puede ayudar bastante, sobre todo para reducir nuestro gasto energético y tener un mejor rendimiento.
Si vemos los datos en porcentajes, resulta asombrosa la cantidad de energía que podemos ahorrar al ir a rueda con otros ciclistas. Por ejemplo, rodando en llano a rueda con otro corredor, se llega a ahorrar hasta el 26%, si se hace lo mismo pero dentro de un grupo numeroso de ciclistas se puede ahorrar hasta el 39%. Por eso, cuando los ciclistas van en grupo, los que van tirando por fuera sufren un desgaste mucho mayor que los que van dentro, y mayor será el desgaste cuanto más aumente su velocidad.
Por el contrario, si la carretera es empinada, la proporción es inversa, es decir, cuanto mayor sea el desnivel de subida, menos ventajas tiene el ir a rueda. Cobra importancia en esta situación el plano psicológico, ya que al tener como referencia a un ciclista delante, nos hace querer subir un poco más rápido, por eso es importante ir siempre rodeado de un buen grupo.
Para esto es muy importante aprender bien la técnica, porque si vamos en grupo podremos causar un accidente en el que más de un ciclista saldrá perjudicado, además de nosotros mismos.
Si vamos nosotros delante, debemos saber:
- Mantener la trazada recta, sin hacer eses.
- Mantener el ritmo. Podemos ayudarnos de un cuentakilómetros.
- Avisar siempre que vayamos a hacer algún movimiento diferente o brusco, o cuando vayamos a bajar el ritmo.
- Señalizar obstáculos del suelo. Los que van detrás no pueden ver lo que hay en el suelo, por lo que debemos avisar en todo momento si hay algún tipo de obstáculo, agujeros o baches.
Si vamos a rueda con el ciclista de delante debemos:
- Colocarnos en el mejor sitio para que no nos dé el aire, en la posición correcta. La posición no tiene por qué ser siempre justo detrás del otro ciclista, sino que dependiendo de la dirección del viento, nos podremos colocar un poco en paralelo, en un lateral…
- Mantener la distancia. Hay que ir cerca pero tampoco excesivamente pegados. Tampoco lo contrario, ir muy despegados porque no aprovecharemos el rebufo del ciclista de delante.
- Mantener la trazada, como el ciclista que va delante, sin hacer eses.
- Estar siempre atento, por si el compañero de delante se le pasa señalizar algún cambio de velocidad, movimiento u obstáculo, es importante estar alerta para que no haya ninguna caída o accidente.