Cuando vamos con nuestra bici a plena luz del día, normalmente veremos los posibles obstáculos que podamos encontrar en el camino, desde otros ciclistas, peatones, hasta cualquier tipo de socavón en el pavimento, objetos, etc. Estos elementos no suponen un gran peligro, ya que gracias a la luz diurna podemos verlos fácilmente.
Sin embargo, esta misma situación en horas nocturnas no sería lo mismo, ya que la visión de esos obstáculos se dificulta bastante, y es más peligroso.
Cada vez son más modernos e innovadores los sistemas de iluminación de las calles o carreteras, pero ¿qué pasa con los carriles para ciclistas o peatones? Normalmente tienen una iluminación deficiente, que dificulta su tránsito por la noche.
En Biciplan, comparador de seguros de ciclistas y bicicletas, hemos encontrado este interesante invento: Starpath. Se trata de un revolucionario recubrimiento para calzadas, vías o caminos, que puede mejorar la seguridad de los usuarios en estas zonas con mala iluminación.
Podemos dividir los sistemas de iluminación en dos: los sistemas activos y pasivos. Los sistemas activos son capaces de modificar sus condiciones de iluminación en dependencia de parámetros como la hora del día, el flujo de personas o vehículos, etc.
Los sistemas pasivos aún tienen mucho que ofrecernos. Starpath se trata de un sistema de este tipo, no precisa de sensores ni sistemas de control para modificar su intensidad.
¿En qué consiste?
Starpath es una sustancia elastomérica (es un tipo de pintura para exteriores, especialmente utilizada en materiales que no aceptan bien la pintura, como la piedra) y antideslizante, que se aplica en forma de spray, de secado bastante rápido y que es capaz de adherirse a una gran cantidad de superficies.
Absorbe la energía de los rayos ultravioleta del sol a lo largo del día para iluminarse de forma autónoma por la noche. La cantidad de luz emitida por Starpath será variable en intensidad y duración, dependiendo del lugar donde haya sido colocado y del tiempo de exposición solar de dicho lugar.
Es una creación de la compañía Pro-Teq, y actualmente el producto está siendo probado en Cambridge, Reino Unido, para iluminar las vías urbanas.
Una de las principales ventajas de este nuevo producto es la seguridad de los ciclistas y viandantes que circulen por estas vías y caminos en horas en las que no haya mucha luz, evitando así posibles daños y accidentes.
Además, este producto supone un gran ahorro de energía al tener esta iluminación propia, ayudando así a disminuir la factura de luz eléctrica de las ciudades. No se podrían apagar todas las luces o farolas, pero sí a lo mejor disminuir su intensidad o apagar algunas.
El propietario de Pro-Teq asegura que “Starpath es rentable. El cliente tiene la opción de tamaño y color de la superficie total, respeta el medio ambiente y es estéticamente agradable”.
Como hemos mencionado antes, el producto se está probando en Cambridge, pero son muchas ciudades ya las que se han interesado por este nuevo sistema.
Quizá en un futuro no muy lejano podamos ver este tipo de iluminación en los carriles bici de nuestras ciudades.