El Camino de Santiago es probablemente el itinerario de gran recorrido más conocido de España. Cada vez más, la bicicleta se ha convertido en uno de los medios de transporte más adecuados y populares para la realización de este camino.
Hay diferentes rutas para realizar con nuestra bici: el Camino Francés con 760km (aproximadamente), el Camino Aragonés con 820km, la ruta primitiva con 315km, el Camino Vasco con 201km, el Camino del Norte con 800km, la Vía de la Plata con 690km, el Camino Sanabrés con 363km, el Camino Portugués con 117km.
A la hora de decidir cómo realizar el camino, es primordial que elijamos qué tipo de bicicleta vamos a llevar, ya sea de montaña, de carretera o híbrida.
La bici de montaña puede ir, en principio, por los mismos caminos que recorren las personas a pie por lo que es una ventaja a tener en cuenta, no tiene muchas restricciones en cuanto al terreno por el que podemos circular y ofrece una mayor facilidad de pedaleo.
La bici de carretera, como bien indica su nombre, es para ir por la carrera y puede resultar más cómoda a la hora de realizar el camino, ya que no encontraremos tantos obstáculos en el terreno como podríamos tener con una bici de montaña.
Otra elección podría ser la bicicleta híbrida, que consiste en una mezcla de las dos anteriores, este sería el caso más conveniente, ya que se ajusta a todo tipo de situaciones.
Una vez que hayamos decidido realizar el Camino de Santiago en bici y seleccionado la bicicleta, debemos tener en cuenta que realizar esta peregrinación supone asumir una serie de riesgos, ya que en bicicleta estaríamos expuestos a sufrir algún accidente con mayor probabilidad que si realizáramos el camino andando, y además con otro inconveniente, y es que podrían robarnos la bici.
Por esto, en los últimos años están aumentando la contratación de seguros de bicicletas, pero no solo en el tiempo de duración en el que se realiza el camino, sino durante todo el año, ya que, como comentan muchos ciclistas, es más rentable contratar un seguro anual, porque no se trata solo de estar protegidos mientras están haciendo el Camino de Santiago, sino que tener este tipo de seguros les proporciona una tranquilidad y seguridad siempre, en cualquier momento.
Antes de ponernos en marcha, debemos tener una buena preparación: física, mecánica y técnica.
Preparación física. Seamos o no aficionados al ciclismo y lo practiquemos con más o menos frecuencia, quizá no nos hayamos enfrentado nunca a tantos kilómetros cada día. Por esto es importante tomarse en serio la preparación física. Se aconseja visitar al médico para hacernos un chequeo o revisión y asegurarnos que podemos realizar el trayecto sin problemas.
Por otra parte, tenemos que realizar un entrenamiento que comience con pocos kilómetros e ir aumentando poco a poco, progresivamente, ya que siendo constantes es como veremos nuestros progresos.
A estos entrenamientos podemos añadir ejercicios diarios para ganar elasticidad en los músculos de las piernas, espalda y cuello.
Preparación mecánica. Tenemos que asegurarnos que nuestra bici está en perfecto estado, para ello se aconseja llevarla a un mecánico que nos aconseje si necesita algunas mejoras o arreglos.
Preparación técnica. Si tenemos algún conocido que sea más experimentado en ciclismo o haya realizado ya el camino en bici, nos pueden aconsejar sobre el entrenamiento, qué postura es mejor en la bici, cuándo hacer los cambios de marchas, etc.
Un aspecto importante a tener en cuenta es el equipaje. En nuestra bici no podemos llevar gran cantidad de bultos, por lo que seguramente tendremos que adaptar algunas alforjas o bolsas que nos permitan poder cargar más cosas en la bici.
Es importante llevar el peso siempre equilibrado para que sea más cómodo a la hora de pedalear. Lo más cómodo es llevar alforjas o parrilla en la parte trasera de la bici, y un triángulo hombrera colocado en la barra del sillín para guardar por ejemplo las herramientas básicas.
Se recomienda llevar ropa ligera y ajustada que no haga mucha resistencia al aire, los colores deben ser no muy oscuros pero sí llamativos para hacernos visibles ante los demás vehículos.
Recordar de nuevo la importancia de la seguridad al circular en bicicleta, el Camino de Santiago se trata de un trayecto de muchos kilómetros, y lo que queremos es disfrutar de esta experiencia y no preocuparnos de nada más, por todo esto es muy recomendable contar con un seguro para nuestra bici. En Biciplan comparamos seguros para bicicletas y seguros para ciclistas entre las mejores compañías aseguradoras y a precios muy asequibles.
Preocupémonos tan solo de disfrutar con nuestra bici…
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