Archivo de la etiqueta: ciclismo

Perro y bici, por supuesto que si

Si tenemos a nuestra mejor amiga de dos ruedas, la bici y a nuestro mejor amigo de cuatro patas, nuestro perro, somos a partir de ahora las personas más afortunadas. Es posible que de los deportes que vayamos a hablar a continuación conozcas más bien poco o casi nadad pero hemos de decirte que es un deporte que va ganando cada vez más adeptos y que tienes la mejor compañía que podías desear, la de tu perro, se trata nada más y nada menos que del canicross.

El Canicross es una modalidad deportiva en la que ambos, tanto el perro como el dueño del mismo, distribuyen por igual los esfuerzos. Este deporte es una modalidad derivada del mushing (el clásico deporte de nieve que se trata de un trineo tirado por perros) que ha dado lugar a varias variaciones como el canicross o el bikejoring, la variante que consiste en una bicicleta tirada por perros. Ambas modalidades se reconocen como deporte propio y se encuentran bajo el amparo de la Real Federación de Deportes de Invierno.

A continuación vamos a hablar de ambos deportes y de sus características:

  • CANICROSS

El Canicross se basa en ir corriendo al mismo tiempo que nuestro perro va tirando de la cuerda que va anudada  alrededor de nuestra cintura. Es obligatorio el uso de arnés de tiro para el animal y se aconseja que éste mismo vaya cruzado hasta la cola y está totalmente prohibido que lleve incorporado algún elemento que pueda provocar heridas o rozaduras al animal como anillas o mosquetones.

El perro y su dueño están unidos mediante una cuerda que recibe el nombre de “línea de tiro” y debe tener incorporada una parte elástica para proteger la espalda de ambos competidores. La línea de tiro no puede superar los 2,5 metros de longitud y con un mínimo de 7 centímetros de ancho para asegurar el buen estado de la espalda de la persona, y se debe enganchar a un mosquetón de apertura rápida fijado al cinturón del corredor, pues si sucede cualquier imprevisto o accidente podamos soltar a nuestro fiel amigo rápidamente

  • BIKEJORING

En esta ocasión, la línea de tiro va fijada a la bici mediante una zona rígida cuya finalidad no es otra que evitar que la cuerda se enrede con la rueda delantera. Aunque está prohibido que un animal participe el mismo día en dos competiciones distintas, el mismo animal puede entrenarse para ambos deportes, aunque esto no sucede si intentamos que un perro de un tiro largo (aquellos que utilizan tres perros o más) que no es el que corre en primer lugar, el líder, pueda participar solo en una carrera porque necesitan tener a un perro corriendo delante que le guíe.

Las superficies por las que no está permitido realizar estos deportes son sobre cemento, asfalto, zonas con muchas piedras… Se permite por hierva, nieve, tierra… aunque si en algún momento hay que atravesar un camino dificultoso puede hacerse sin problema y si queremos proteger más a nuestros animales, además de tener contratado el seguro médico para perros se les puede ayudar con productos para fortalecer la zona o colocarles una especie de protectores para sus almohadillas.

Ambos deportes pueden ser practicados por cualquier persona al igual que el animal siempre y cuando ambos reúnan unas condiciones de salud adecuadas para la práctica de ejercicio deportivo y siempre se puede hacer de manera profesional o de manera de entretenimiento  y los beneficios se manifiestan de manera bastante rápida ya no solo por todos los beneficios del deporte propio sino por la mejora que se realiza en la comunicación entre el dueño y el animal.

En cuanto a los perros más adecuados para realizar este tipo de deporte, no hay ningún tipo de restricción para las razas caninas aunque es más que evidente que aquellas razas que posean unas características físicas más adecuadas son los que mejor nos puede venir para realizar este tipo de entrenamiento. Si hablamos a nivel competitivo, los perros con mayores características especiales son los perros de caza y los pastores y los llamados “Alaskanos” que en la mayoría de las ocasiones son el resultado de un cruce ente los perros nórdicos, galgos y pointers, todos estos siempre protegidos con los seguros veterinarios

Hablando en cuanto a la elección del perro, tenemos que tener muy en cuenta, el nivel del corredor para que el nivel del perro que se vaya a utilizar sea similar ya que tanto por exceso o por defecto es negativo, es decir, si elegimos un perro que sea más lento que nosotros, tendremos que adaptarnos a su ritmo y si es mucho más rápido que nosotros, vamos a ir “con la lengua fuera”

Si queremos pasarlo bien, coge a tu mascota y ponte a entrenar con el pero si buscas un nivel superior, tendrás que buscar un perro con unas características más concretas tanto físicas como de personalidad, sociable, con motivación pero sin ser sobreexcitado ya que aunque tenga unas buenas características no presta la atención suficiente. Si vas a buscar a un perro más concreto, no te olvides de todas las perreras y adopta.

En cuanto a los entrenamientos, tenemos que tener claro que el entrenamiento del corredor y del animal deben ir por separada. El perro debe tener una edad mínima para competir pero en el tema de sociabilización se le puede ir educando desde los meses y cuando hayan pasado unos años ir enseñándole. Además, al ir el animal por delante de nosotros en la carrera, debemos de enseñarle una serie de órdenes básicas como salida, stop, izquierda o derecha…

Como hemos comentado, el entrenamiento de uno y otro debería hacerse por separado pero si queremos ir adaptándonos el uno al otro, podemos correr pero sin ir atado ni a la cintura ni a la bici. Se debe de entrenar casi a diario pero con sus descansos correspondientes porque debemos de recordar que cuando el animal comienza no sabe qué distancia se recorre y por ello la alimentación del animal en todo momento tiene que ser de la mejor calidad posible para que rinda al máximo.

Es conveniente que los días previos a la competición vayamos adaptando las horas de la comida y de los entrenamientos a los horarios de la competición, así como el horario que tienen marcada para realizar sus necesidades porque puede ser que en mitad de la carrera, el animal pare para realizarlas sin culpa alguna, por ello es importante todo ello al igual que no debemos de confundir al animal cuando va a pasear que cuando va a entrenar así que el mismo tiene que interpretar por diversas pistas como colocarle el arnés que va a entrenar.

En cuanto a las competiciones es necesario que se esté inscrito a un club y se posea una licencia federativa, así como estar provisto el animal del microchip, del seguro de responsabilidad civil para la práctica deportiva y estar vacunado de polivalente, antirrábica y “tos de las perreras”.

Es necesario que tenga un mínimo de 1 año para participar en las pruebas de canicross y un año y medio para las de bikejoring.

A continuación vamos a exponer las diferentes competiciones oficiales que hay a nivel estatal:

  • Campeonato de España sobre tierra (consta de una prueba única).
  • Campeonato de España sobre nieve (consta de una prueba única).
  • Copa de España de Mushing: Canicross (consta de siete pruebas).
  • Copa de España de Mushing: Bikejoring (consta de cinco pruebas).

Además de las diferentes ligas de algunas autonomías como la gallega o la madrileña.

La competición expone que el animal tiene que ir siempre por delante del corredor nunca detrás o en paralelo, si así fuese puede llevar a descalificar o penalizar.

Existen en estas competiciones en algunas ocasiones, distintos tipos de salida, bien puede hacerse todo el mundo al mismo tiempo o por categorías o individuales con intervalos de 30 segundos entre cada uno de ellos.

En el momento de la salida, se debe de coger la línea de tiro para evitar enredos entre los animales y una vez que se dé el pistoletazo se puede soltar y es posible que el momento más tenso sea este mismo ya que se encuentran todos los perros juntos y la excitación de éstos y la proximidad entre ellos puede provocar algún que otro problema.

Se dividen por categorías pero no sólo por el perro ya que no importa la raza, la edad… pues se tiene en cuenta la edad y el sexo de los corredores y se divide de tal forma:

  • Cadete: De 12 a 13 años recorriendo una distancia máxima de 5 kilómetros.
  • Juvenil: De 14 a 16 años.
  • Sénior: De 17 a 39 años.
  • Veterano A: De 40 a 49 años.
  • Veterano B: De 50 años en adelante.

Las distancias que se recorren van a variar dependiendo de la movilidad y de la temperatura. Existen diversas modalidades como la de spring que son de una distancia máxima de 12 kilómetros.

Pues amigos esto es todo, esperamos haber puesto un poco de luz a este tipo de deporte y que cojas a tu bici y a tu animal y recordar que existen todo tipo de perros como el seguro para perros peligrosos.

Consejos para comenzar con la bici

En múltiples ocasiones habrás pensado que quieres apuntarte a un gimnasio pero no voy a tener tiempo, quiero hacer ejercicio pero es que el tiempo no es del todo bueno, pues señoras y señores la solución a todas sus plegarias llegó, bueno lleva ciento de años entre nosotros, la bicicleta.

La bicicleta, ese gran invento que llegó a nosotros y que fue casi el primer regalo que nos hicieron nuestros padres, es el instrumento ideal para estar en forma y encima de la manera más barata, y con un seguro para ciclistas casi gratis.

A continuación os vamos a presentar una serie de consejos para que le disfrute sea máximo y siempre tengáis ganas de rodar más y más tiempo.

  • Cuidar de nuestros músculos. Ya que vas a comenzar, comencemos de la mejor manera posible. Es recomendable ir siempre con cierta cadencia y agilidad. Cuando vayamos rodando en llano, es decir, sobre tierra firme el número de pedaladas por minuto puede rondar una media de 90-100 pedaladas, y en el caso de las subidas, la media pasaría a 60-80 pedaladas por minuto. EN el momento que descendemos de manera brusca la cadencia, la tensión muscular que se genera es mucho mayor y provoca que las fibras consuman una mayor cantidad de glucógeno para realizar los movimientos y al mismo tiempo genera más ácido láctico, traducido como una gran cantidad de agujetas al día siguiente.
  • Pedalea con quién esté a tu nivel. Al igual que en cualquier parte de nuestra vida, las personas con las que te reúnas te pueden pasar una mala jugada, y en ciclismo no iba a ser diferente. Puedes tener muy buenos amigos pero quizás el nivel de cadencia que llevan es superior al tuyo y eso solo te va a traer problemas así que queda con ellos para un café pero no para rodar. Si son personas que llevan muchos kilómetros en sus piernas, el esfuerzo que vas a tener que realizar es demasiado grande y son esfuerzos que no te van a aportar ningún tipo de beneficio, es más puede ser insano para ti.
  • Pulsaciones controladas. Si con las mínimas pedaladas te notas que las pulsaciones han subido considerablemente, debes tomártelo con calma. Aquellos ciclistas que presentan un “corazón anaeróbico” trabajan siempre con unas pulsaciones por encima de la media ya que al poseer un corazón con unas medias menores en necesario un mayor número de pulsaciones para que bombee al igual que lo haría un corazón más grande. Cuando el corazón tiene un tamaño normal, con cada latido expulsa un mayor cantidad de sangre, oxígeno y alimento.
  • Adaptación del ciclista. Una vez que estamos rodando nos vamos adaptando al terreno y si eso significa cambio de platos, pues se realiza y punto así nos aseguraremos una cadencia correcta.
  • Antes de rodar, escoge el recorrido. Hasta que no lleves un tiempo rodando y puedas ir controlándote, sobre todo las pulsaciones es aconsejable que se ruede por los terrenos más llanos posibles para que las pulsaciones son se disparen demasiado.
  • Establece los kilómetros a rodar. Las salidas que vayamos a hacer, a medida que vayamos avanzando, podemos ir aumentando la intensidad pero al comienzo, siempre tienen que ir de menos a más porque te lo vas a agradecer.
  • Céntrate en lo importante, no lesionarte. Debemos centrarnos en lo que realmente es importante, en controlar que las pulsaciones sean correctas y lleven una media que nos va a ir indicando si nuestros entrenamientos empiezan a dar sus frutos y tener una constancia para alejar las lesiones lo máximo de nosotros.
  • Ir adaptándonos perfectamente. Las adaptaciones, como con cualquier cosa en la vida, deben ser pausadas pero que sigan un ritmo constante ya que toda aquella que se consiga en un intervalo de tiempo prolongado, va a durar más y si dejamos de entrenar, volver a recuperar esa forma no va a ser difícil. En el caso que comencemos muy fuerte, es posible que nos convirtamos casi en campeones en un intervalo de tiempo relativamente corto pero a medida que va pasando el tiempo, nuestro cuerpo va a necesitar un descanso.
  • Entrenamientos alternativos. Hablamos del ciclo indoor, una práctica deportiva que puede ser muy beneficiosa siempre y cuando se utilice bajo unas condiciones. Si tenemos alguna prueba ciclista y queremos entrenar un poco más intenso puede ser bueno pero no es conveniente que se realice en los inicios para suplir la falta de tiempo.
  • Entrena cómo quieras, no cómo quieran. Si además de entrenar con la bici, vamos al gimnasio, cumpliremos todos nuestros objetivos. En el gimnasio, vas a tener la oportunidad de fortalecer los tendones, articulaciones… además de adquirir fuerza. En primer lugar aconsejamos tonificar los músculos antes de empezar a añadir más carga ya que como en todo, tenemos que llevar una periodización al igual que con la bici.
  • Suplementos, ¿sí o no? Los suplementos son algo que tenemos que ir tomando con precaución. Al comienzo, no se suele recomendar tomar ningún aporte extra ni en particular. Es posible que empieces a necesitar alguno una vez que ya empezamos a trabajar con cierta intensidad. El seguro para bicicleta no es un suplemento, es casi obligación.
  • La comida, importantísima. El tema de los carbohidratos, es un tema que vuelve loco a más de uno, y es que el hecho de que se empiece a entrenar de forma pausada no significa que no tomes carbohidratos ya que estos no engordan, excepto que se ingieran en exceso. Cada vez que salimos con nuestra bici, es recomendable salir con algo de alimento por cualquier cosa que pueda suceder como barritas, plátanos…
  • Si estás enfermo, estás enfermo. Si nos indisponemos y si además, tenemos fiebre, no estamos en condiciones para entrenar ya que no tenemos la fuerza suficiente que normalmente tendríamos y si nos exigimos demasiado, podemos empeorar y llevarnos más tiempo del necesario sin entrenar.
  • Hazle caso al cuerpo y a la mente. Si hoy no nos encontramos con las fuerzas necesarias o las ganas de entrenar, pues no se entrena, que tampoco va a pasar nada, es más, el descanso es una parte muy importante del entrenamiento. La persona que entrena, no solo hace eso durante todo el día sino que se le suma trabajo, vida familiar… Si el cansancio es una consecuencia clara de los entrenamientos que realizas, ya sabes, frena y descansa.
  • Estirar, estirar y por último, estirar. Después de terminar cualquier entrenamiento físico, el tiempo de recuperación, es decir, de estiramientos es de alrededor de quince o veinte minutos, con ello recuperarás antes y evitarás futuras lesiones, sobretodo del tipo muscular que son las más complicadas de recuperar y las que nunca avisan.

Consejos que os puede ayudar a que os convirtáis en ases del ciclismo, así que tomar buena nota para ser los reyes de la pista, eso sí, con el seguro de bicicleta siempre.

Que no sufran las piernas en la bici

Muchos ciclistas al comenzar una marcha reflexionan que no están del todo capacitados para poder salir como una bala, a tope al inicio de la carrera o en el momento que necesiten acelerar rápidamente en un momento temprano de la carrera porque al rápido de turno, que nos lo podemos encontrar en todas las grupetas, le da por pasar por todos y claro aquí viene el gran problema, las piernas se nos ponen duras como piedras y el tiempo de resistencia que podemos llevar es muy corto por lo que así no hay quien rinda, y ¿cómo prevenir todo esto? Pues es bien sencillo, calentar perfectamente y con conciencia primero, y tener un seguro de bicicleta.

El hecho de no prepararse primero tanto física como mentalmente provoca que haya ciclistas que pasen por una verdadera agonía al comenzar la competición y se plantean una pregunta bien sencilla, ¿cómo salgo en la carrera perfectamente sin tener que abandonar a los dos segundos? Como hemos comentado anteriormente, muchos de estos buscan algún tipo de entrenamiento propio para poder rodar al máximo de nuestro nivel sin que las piernas sufran más de lo necesario. Acostumbrados a escuchar expresiones como “tengo las piernas más duras que una piedra” o “no puedo, me duelen las piernas a rabiar” en las salidas de las pruebas.

Si que tenemos que aclarar que existen muy pocas personas que salgan a tope en una carrera porque casi al 90% se ven amplias sonrisas en los ciclistas debido al disfrute y para que no aparezcan fantasmas, fatiga o agotamiento un correcto calentamiento es la clave para que no nos pase ningún problema ni en la salida ni durante el rodamiento, además teniendo el seguro para bicicleta seguro que no habrá problema alguno.

El calentamiento, en cualquier deporte, es muy importante debido que con el nuestro cuerpo va asimilando que va a sufrir una serie de efectos, y ya no solo a nivel muscular (tanto del sistema cardiovascular, articular, cartilaginoso…). Por ejemplo, si se pretende salir a  tope en una competición y no se ha llevado a cabo el calentamiento conveniente, la temperatura de nuestro cuerpo no ha ido aumentándose progresivamente hasta un punto suficiente para poder conservar unos niveles de percepción y de transmisión de las señales nerviosas que necesita una situación de alerta como puede ser la propia competición o carrera. Como hemos dicho, sin un apropiado calentamiento, la coordinación y la capacidad de reacción se encuentran a  unos niveles inadecuados en el momento y que puede conllevar a que tengamos algún problema, como puede ser una caída de la bici.

El calentamiento va mucho más allá y es mucho más sencillo, un calentamiento es más que necesario para disminuir el riesgo de sufrir una lesión, en particular, una de fibras musculares, tendones o ligamentos y además permitirás que el sistema cardiovascular se abra paso a nivel de nivel de tronco inferior y los músculos puedan recibir de tal modo una cantidad de oxigeno y alimento mayor. Una de las consecuencias de salir de casa sin un previo calentamiento, es que vas a tardar más tiempo, entre 15 a 20 minutos, en que el riesgo sanguíneo llegue a todos los músculos.

Ahora la otra gran pregunta puede ser, ¿cuánto tiempo debemos calentar para que sea efectivo y cómo debemos hacerlo?

En primer lugar, la duración que tendría que tener un calentamiento va a depender en gran medida de la temperatura ambiente que haga en el entorno, si la temperatura ambiente es fría, el calentamiento tendrá una duración mayor que si la temperatura exterior fuera más elevada, aunque si no eres una persona muy experimentada, un calentamiento demasiado excesivo puede ser también perjudicial.

La intensidad con la que vayamos a practicar el calentamiento va, además, en función de la exigencia con la que vayas a rodar con nuestra bici, no es lo mismo un calentamiento para salir a pedalear por gusto que para un entrenamiento para una competición. Si el entrenamiento con la bici  que vamos a  llevar a cabo va a ser poco exigente y la temperatura que nos rodea es agradable con unos quince o veinte minutos de calentamiento no muy intensivo tenemos más que suficiente, sin embargo, si tras el calentamiento va a venir un entrenamiento para una carrera, un mínimo de treinta o cuarenta y cinco minutos para calentar correctamente.

Un ejemplo:

  • Unos cinco minutos en regenerativo
  • Diez minutos progresivos en zona de resistencia aeróbica
  • Unos cinco intervalos de dos minutos en intensidad aeróbica, donde los seis últimos segundos de cada intervalo se acelere y tras ello una recuperación de 1 minuto.
  • Por último, diez minutos regresivos en zona de resistencia aeróbica

Si vamos a realizar un calentamiento para entrenar de cara a una marcha a contrarreloj o cara a una competición, se recomienda la ingesta de un gel (apropiado con guaraná o cafeína), a unos cinco minutos antes de producirse la salida.

Parece que queda claro, calentar, entrenar y seguro de bicicleta.

La mente mientras vamos en la bici

Y es que cuando hablamos de ciclismo, no solo tenemos que preocuparnos del entrenamiento físico que si este es importante, un perfecto entrenamiento mental es igual o más importante que el primero. La psicología deportiva es tan importante en el  mundo de los deportes que sin una buena orientación, la mitad de los ganadores que conocemos en cualquier tipo de competición no lo serían. Como  íbamos diciendo, la psicología deportiva es la que se ocupa de todo el entrenamiento mental que llevan a cabo los deportistas y podría concretar como el estudio científico de los elementos psicológicos relacionado con la práctica de deporte.

La psicología deportiva se puede extrapolar a cualquier ámbito como en el deporte base o en el deporte practicado por ocio, pero se desarrolla con un mayor porcentaje en los deportes de competición. Cuando realizamos cualquier deporte ya sea jugar al fútbol o montar en bici, el entrenamiento siempre se va a fundamentar en cuatro aspectos claves: Aspecto físico, aspecto técnico, aspecto táctico y el aspecto mental.

Hablando del tema que nos concierne, el ciclismo, la persona que lo desarrolla sabe que la preparación física es la base para conseguir los objetivos que se quiera proponer y al igual que intenta cada vez que entrena intenta prosperar en la técnica de pedaleo o en las bajadas, ¿por qué no se plantean entrenar la mente como si de un musculo más se tratara? ¿Cuántos ciclistas tienen por costumbre entrenar la mente con lo importante que resulta? La psicología deportiva no es síntoma de flaqueza, es más, es un síntoma de conocerte mejor de lo que piensas, igual que tener un seguro de bicicleta, es una manera de tenerlo todo bajo control.

Cuando salimos a rodar en muchas ocasiones nos sobreviene emociones distintos y pueden ser tanto positivas como negativas y estos últimos son los que nos puede llevar a desarrollar una emoción negativa e incluso pensamientos que a simple vista no pueden parecer inofensivos, pueden volverse hacia nosotros de manera negativa y la pregunta que tenemos que plantear ahora es, ¿podemos luchar contra esos pensamientos negativos y contra esas emociones? La respuesta es bastante clara, porqué no, siempre y cuando sepamos como hacerlo.

Debemos de desarrollar un entrenamiento psicológico especial para cada uno de nosotros porque en ocasiones sabrás identificar que es lo que ocurre por previa experiencia, pero en otras ocasiones no sabremos cómo reaccionar. Un ciclista acepta, por experiencia, cuando la cabeza o la mente fallan y que no estén al 100% pueden jugar malas pasadas. Conoceremos de muchos ciclistas que siempre están a la cabeza, nunca abandonan… y es todo debido a su fortaleza mental.

Habitualmente se tiende a pensar que la fortaleza mental o se tiene o no se tiene pero eso no es realmente así, si es cierto que aquel que posea tales características, esa ventaja la va a llevar pero quien no la posea puede trabajarla y entrenarla como una parte más del cuerpo, como el seguro para ciclista, una parte más de la bici.

Es posible que hayamos escuchado en más de una ocasión o incluso las hayamos podido nosotros mismos pronunciar “No podía más pero he echado el resto” o “Iba pensando una cosa pero las piernas me decían que no podía más”. Si nos damos cuenta, todo está relacionado con la mente, la mente es la que te da el último empujón para tirar o es la que te hace que no llegues ni a mitad de camino, se van a extrapolar las llamadas variables psicológicas, todas aquellas características que con el hecho de que aparezcan o no pueden tener un efecto en la persona a nivel de conducta, cognitivo y fisiológico.

Existen variables que desarrollan una relación directa con el rendimiento deportivo de los que podemos destacar la autoconfianza, la motivación o el estrés, entre otros. Estas variables comentadas son algunos de los aspectos que se ocupan en la psicología del deporte. El hecho de acudir a un especialista no está solo limitado a los ciclistas puros, tanto si nos gusta  ir a marchas como si montamos por ocio o por salud, la psicología deportiva nos puede aportar muchas cosas positivas que no solo nos va a ayudar en el ámbito del ciclismo sino que también podemos extrapolarlo hacia otros ámbitos.

La figura del psicólogo, una persona cuya meta es ayudarnos a alcanzar objetivos tiene un claro papel y su manera de desenvolverse es diferente también según la persona con la que tenga que trabajar. No se trabaja igual con un ciclista profesional que con una persona aficionada y que pedalea por puro placer. Entre algunos de los aspectos que intenta trabajar el psicólogo podemos establecer, por ejemplo, planificar los objetivos de la temporada, aprender a llevar durante todo el recorrido el positivismo… pero no sólo podemos quedarnos con la teoría, es importante saber que todo lo que nos han comentado tenemos que desarrollarlo y practicarlo en los entrenamientos y en las salidas que vayamos haciendo.

Para que podáis entender cómo se adapta la psicología al deporte vamos a ver una de las técnicas más utilizadas por los altos resultados que suele dar: la parada de pensamiento y auto-instrucciones.

En primer lugar, empiezan a manifestarse pensamientos negativos cuando estamos en mitad de una marcha cicloturista como “No voy a poder completarlo” o incluso se pueden manifestar pensamientos positivos que nos pueden perjudicar más que uno negativo como “Subo este puerto lo más rápido posible con la bici  aunque me rompe”.

Tras ello, tenemos que darnos cuenta de que esos pensamientos se apoderan de nuestro pensamiento y tenemos que detenerlos (la parada de pensamiento) como pronunciando palabras que corten ese pensamiento (stop o fuera).

Una vez que hemos parado ese tipo de pensamiento, tenemos que guiar la situación para controlarla, con las auto-instrucciones, es decir, nos tenemos que autoconvencer que tenemos que enmendar la situación, estableciendo frases de apoyo como “Ya nos falta menos, vamos a lograrlo”…

Por último, nos auto-reforzamos por haber superado ese momento tan agudo con frases como “Sabía que lo conseguirías” o incluso mediante recompensas como descansar un rato más largo  sobre nuestra bici de lo que estamos acostumbrados.

Entrenar cuerpo y mente es algo más que necesario porque sin fortaleza mental, la fortaleza física no sirve de nada, como una bici sin seguro para bicicleta.

Para que la bici no nos lesione

La bicicleta, además de ser un aliado para ayudarnos a ponernos en forma y a que nos sintamos cada día más a gusto con nosotros mismos, puede también desarrollar algún que otro inconveniente en cuanto a nuestra salud ya que si no tenemos el correcto control y las proporciones exactas podemos sufrir o recaer de algún lesión. A pesar de que tenga el seguro de ciclista la bicicleta, la salud del ciclista no se puede perder.

Una posición equivocada sobre la bicicleta, un sillín que no esté adecuado a la altura correcta, una incorrecta postura sobre el manillar… son algunas de las malas prácticas que llevamos a cabo cuando vamos subidos a nuestras bicis. Estas malas posturas provocan leves dolores musculares que si no se corrigen podrían desembocar en una lesión algo más grave.

En primer lugar, vamos a hablar de uno de los principales problemas que nos surgen cuando vamos sobre la bicicleta y es la PEDALADA. Esta acción es una continua de flexión y extensión de la rodilla, cadera y tobillo que se ve acompañada por la estabilidad que da la unión de tronco y abdomen, de la zona lumbar.

Cuando vamos pedaleando, se van a poner a trabajar una serie de músculos que harán que seamos en mayor o menor medida eficaces. En la acción intervienen, por una parte, los musculares extensores de la rodilla cuando realizamos la acción de bajada del pedal y por otro lado, los músculos flexores de la rodilla, los Isquiotibiales que llevan a cabo la subida del pedal.

Cuando se nos desarrolla una lesión, estas vienen generadas, principalmente, por una falta de sincronización entre la posición adecuada y las medidas de la bicicleta dónde también contaría la incorrecta altura del sillín o las alteraciones que puedan sufrir nuestro propio cuerpo.

SI anteriormente hemos hablado de la pedalada, ahora vamos a tener en cuenta la ALTURA INADECUADA.

Para que la rodilla tenga un adecuado trabajo, la posición que tenga el sillín va a ser clave ya que una mala altura nos puede derivar algún que otro problema. La perfecta altura del sillín será aquella que nos permita la máxima extensión, es decir, que a una posición correcta la extensión que se produzca sea entre 155 y 160º y una flexión entre 25 y 30º

Otro de los elementos que tiene bastante que ver con el tema de las lesiones, es la LONGITUD DE LAS BIELAS, y ¿por qué es tan importante? Debido a que la longitud de las bielas está directamente vinculada con la presión que se va a ejercitar sobre la rótula, por lo que deducimos que si tenemos puestas las oportunas bielas, los problemas en la articulación de la rodilla se pueden evitar.

Existen distintas medidas de las bielas y está relacionada con la longitud del fémur de la persona por lo que el uso de unas correctas bielas nos harán el pedaleo mucho más fácil. Por ejemplo si tenemos un fémur entre 38 y 42 metros, tendríamos que emplear una biela de 167.5 mm.

Con el cambio de las bielas en una bicicleta cuando se ha estado manejando otras anteriormente, es posible que se pueda desarrollar algún tipo de consecuencia muscular, por lo que los expertos aconsejan que si se va a  realizar un cambio de bielas, el cambio de estas no sea superior a los 2.5 mm y una vez realizado la variación, no se debe variar nuevamente, la pierna debe de adaptarse a la nueva altura.

Otro de los problemas que podemos desarrollar con las rodadas en bicicletas es que las lesiones puedan proceder de nuestro propio cuerpo, debido a unas ALTERACIONES ANATÓMICAS.

Aunque parezco raro y a simple vista no se observen, existen dos tipos de piernas, es decir, la presión con la que se ejerza el movimiento con la pierna va a depender en gran medida de la alineación de los ángulos y eso recae en una alineación anatómica del miembro.

Como hemos comentado existen dos tipos de piernas:

  • Piernas en “X” o valgas. Se trata de unas piernas donde las rodillas tocan entre sí pero no lo hacen sus tobillos (por eso la forma de X). La tendencia que poseen estas piernas es a rotar internamente o los pies se giran hacia dentro por lo que provoca un esfuerzo extra en la parte del tendón rotuliano, que provoca una tendinitis. La solución más inmediata es la colocación de unas plantillas en el calzado del ciclista y unas cuñas entre el pedal y el calzado en la bici.
  • Piernas en “O” o Varo. En este caso, se trata de unas piernas que provoca que los tobillos choquen entre sí pero no las rodillas entre sí (formando entre las piernas una O). Las rodillas al arquearse, provocan un aumento de fuerza sobre la parte externa de la rodilla. La mejor solución es la alineación entre la cadera y el pie y por la ayuda de separadores se puede ampliar la extensión entre el pedal y la biela.

Y por ultimo vamos a ver otra de las posibles  alteraciones de nuestro propio cuerpo que sin una corrección nos puede llevar a lesiones cuando vamos pedaleando sobre nuestra bici y a pesar de tener contratado el seguro de bicicleta, la salud de la persona está por encima, ese problema es la DISIMETRÍA DE LAS EXTREMIDADES.

La desigualdad entre la longitud de las piernas ocasiona una discordancia en el empleo de la musculatura que se ve implicada en el pedaleo y que puede derivar en molestias, dolores…

¿Cómo podemos saber si nuestras piernas miden lo mismo o tienen alguna diferencia entre ellas? En primer lugar tomemos una cinta y midámonos y constatemos las tibias y los fémures de ambas piernas.

¿Existe una diferencia? No pasa nada. Primero: Ajustar la bicicleta a la pierna más larga

  • Si la diferencia de las tibias es superior a 6mm, colocamos una plantilla de unos 4 mm en la pierna de menor tamaño.
  • Si la diferencia de los fémures es mayor a 6 mm, se ajusta el sillín a la pierna más larga y se coloca una plantilla en la pierna más pequeña de unos 2-3 mm.

Ya sabéis lo que tenéis que hacer, además de contratar el seguro de bicicleta, comprobar todo lo que hemos mencionado anteriormente.

Por la Isla de Wight, en bici por favor.

Hace poco en uno de nuestros post anteriores estuvimos halando de diferentes rutas para realizar por Europa y una de ellas era la indiscutible, “Isle de Wight”, un paraíso para los amantes del ciclismo. Impresionantes colinas que ruedan por encima del mar, particulares calles descubiertas tras verdosos setos, exclusivos barrancos verdes por explorar, con una clara característica la cresta de los blancos acantilados de tiza de grandes extensiones. La oferta la conoces, coge la bici, coge lo imprescindible (que no se nos olvide el seguro de la bici) y toma el primer avión hacia Inglaterra, no te vas a arrepentir.

Armoniosos caminos rurales tan pintorescos que van a  parecer pintados es lo que hacen de Isla de Wight el lugar ideal para perderse. Sus rutas son la excusa perfecta para unas vacaciones de pedaleo o una pequeña escapada a Reino Unido.

Para cada gusto particular, hay una ruta diseñada, una selección infinita para desafiar un terreno de caminos tranquilos y pasos a nivel construidos en las antiguas líneas de ferrocarril. En poco menos de 380.73 kilómetros cuadrados, podemos hallar más de 321.87 kilómetros de vías ciclistas que van meciéndose entre el campo y la costa.

Si no puedes llevar tu bicicleta, allí mismo puedes alquilar tu bicicleta ya que dispone de un gran número de puestos alrededor de toda la isla y además, existen empresas de transporte que te ofrecen servicios de entrega y nos brindan la oportunidad de un servicio guiado con pases exclusivos aunque no creo que puedan ofrecerte buenos seguros de bicicleta.

“Bicycle Island” ha puesto en marcha, la celebración de la isla como uno de los grandes destinos de gran prestigio para el mundo del ciclismo. Las rutas que más adelante os vamos a mostrar se dividen en diferentes tipos de dificultad y en el tiempo disponible que se tenga, dependiendo de lo que cada uno esté buscando. Se dispone en:

  • Red Squirrel Trail. Un paseo agradable en familia por carriles bicis y viejas líneas de ferrocarriles adaptadas.
  • Chalk Ridge Extreme. Travesías de 80.467 kilómetros desarrolladas sobre
  • Taste Round the Island. 106.22 kilómetros de paseo por tranquilos terrenos y con la excusa perfecta para saborear los productos de la isla, una ruta gastronómica en toda regla.
  • Day Rides. Una gran variedad de trayectos y recorridos en función del tiempo disponible

Además la isla acoge anualmente el festival del ciclismo celebrada en septiembre, donde se da cabida a una serie de eventos de ciclismo que abarcan todos los aspectos del deporte en sí y del ciclismo recreativo. La temporada de ciclismo sirve tanto para celebrar el propio deporte como para reforzar la posición  líder de la isla en el mundo del ciclismo. Ofrece una variada gama para todas las edades y para todos los tipos de ciclismo, así como un variado programa de entretenimiento para los espectadores.

Y para que todo salga redondo, se han creado innovadores mapas, “mapas splash” que resultan prácticamente indestructibles.

A continuación os mostramos las diferentes rutas con todos los detalles que las hacen únicas.

  • Red Squirrel Trail (37.739 km y dificultad tipo baja).

La ruta familiar está diseñada para que todos monten cómodamente, rutas suaves principalmente planas. El nombre de la ruta proviene por las ardillas rojas que viven en el interior de la ruta. La mayor parte del trayecto  discurre por zonas dónde el ferrocarril circulaba, así podremos ver la campiña de la isla. El sendero ferroviario entre Cowes y Sandown tiene una gran importancia debido a  la belleza que se esconde tras de sí, con esta ruta se observará algunos sobrecogedores hábitats que nunca pensaste poder ver. Para poder exprimir cada centímetro de esta ruta, os aconsejamos tomaros dos días para disfrutarla.

  • Chalk Ridge Extreme (80.467 km y dificultad tipo alta)

Esta ruta circular de 80.467 kilómetros es lo más duro que vamos a encontrarnos en la isla pero la mayor satisfacción una vez superada. La forma física y buenos entrenamientos son fundamentales para superarla. Es la ruta fuera de carretera de la ruta ciclista de la isla y es debido a que se bordean y se circula por las algunas de las más impresionantes cordilleras de tizas blancas y únicas bajadas del país.

Son extraordinarias las vistas que podemos tomar desde la espina dorsal de la isla.

  • Taste Round the Island (104.06 kilómetros y dificultad tipo media)

La ruta del sabor alrededor de la isla fue creada en 1985 y este trayecto de poco más de 100 kilómetros lo pueden recorrer una media de 3.000 personas. Recorrerlo en un día entero es más que un reto por eso aconsejamos tomarse varios días (una media de 3 días) para así deleitarse con todos los placeres que nos vayamos encontrando.

A medida que nos vamos adentrando en la ruta, vamos a ir encontrando numerosos lugares de comida y bebida (la mayoría sirven productos locales).

Una de las características más importante de esta ruta es en consecuencia  al clima que suele poseer, un clima marítimo frente al sur de Inglaterra y en ciertas partes de la isla se pueden contabilizar mayores horas de sol que en otros lugares de Reino Unido. Lo mejor de todo, el apoyo a la economía rural y por supuesto, los magníficos paisajes rurales que encontraremos a su paso.

  • Day Rides (Variabilidad en cuanto a kilómetros y dificultad tipo baja-media)

Los paseos de varios días son la oportunidad perfecta para conocer nuevos horizontes, tenemos la oportunidad de elegir que camino recorrer y por lo tanto que conocer.

Existen hasta 12 diferentes tipos de rutas que podrás escoger como bien quieras. Por ejemplo, la ruta Ryde, es la combinación perfecta de costa y campo con una selección de rutas más cortas.

Ahora que conoces lo importante, ya sabes, ropa para varios días, identificación, el seguro de la bicicleta, dinero y lo más importante, ¡las ganas de disfrutar (y la bici por supuesto)!

Diccionario ciclista, la jerga más utilizada en el mundo de las dos ruedas

Si te gusta el ciclismo, deberías conocer al menos algunas de las palabras más utilizadas en este deporte. Siempre es importante tener estos conocimientos, ya que nos puede servir de ayuda en nuestras salidas en bici, si tenemos algún problema, algo que reparar, o simplemente para hablar con otros ciclistas.

A continuación, desde Biciplan, comparador de seguros de ciclistas y bicicletas, hemos seleccionado algunas de las palabras más empleadas en el mundo del ciclismo, acompañadas de una breve definición.

Abanico: término que se emplea para hacer referencia a la formación de los ciclistas cuando corren de lado de la calzada con el objetivo de taparse del viento que les llega de costado.

Abrirse: acción de bajar el ritmo o desentenderse de la carrera o competición, por causas como la falta de fuerzas, por ejemplo.

Aguador: nombre con el que se conoce al ciclista encargado de bajar a la cola del pelotón para buscar agua y alimentos para el resto de compañeros de equipo. Normalmente esta misión se le atribuye al ciclista que no tiene ninguna posibilidad de ser el vencedor de la etapa.

Afilador: acción por la cual un ciclista roza con su rueda delantera la trasera del corredor que va delante, provocando la caída del primer ciclista.

Araña: es una pieza cuya función es sujetar los platos de la biela, de la cual puede formar parte o ser desmontable.

Autobús: grupo de ciclistas desentendidos de la etapa, que solo pretenden no llegar fuera de control.

Badana: almohadilla que utilizan los ciclistas en el interior del culotte, para protegerse de golpes contra el sillín.

Biela: a través de ellas se transmite la fuerza a los platos de la bicicleta. Es una palanca que va desde cada pedal al extremo del eje del pedalier.

Buje: mecanismo situado en el centro de la rueda, que contiene los rodamientos para realizar el giro de la rueda y los piñones en la rueda trasera.

Cabra: nombre vulgar que se le da a la bicicleta especial utilizada en pruebas contrarreloj/pista debido a la inclinación del cuadro en su parte delantera y a la forma del manillar.

Cadencia: número de pedaladas por minuto que realiza cada pie.

Cazaetapas: corredor especializado en ganar etapas o pruebas de un día.

Chichonera: protector para la cabeza que se usaba antiguamente antes de que se inventara el casco, aunque todavía hay corredores que lo siguen usando. Es algo más ligero que el casco, y protege menos que éste.

Corte: fraccionamiento del pelotón, puede ser por una caída, la acción del viento o por un ataque de un grupo de corredores.

Corona: sinónimo de piñón.

Cuernos: acoples en el manillar, típicos de las BTT, que ayudan a cambiar y combinar posturas en la bicicleta.

Culotte: pantalón o parte inferior del equipamiento de un ciclista.

Demarraje: aceleración fuerte y repentina con el fin de escaparse y dejar atrás a los rivales.

Desarrollo: se obtiene combinando los platos y los piñones. El mayor desarrollo es el que corresponde al plato grande con el piñón más pequeño. Con él se recorren más metros por pedalada y supone el máximo sufrimiento muscular. Se suele usar en llano.

Dirección: pieza que une al cuadro con la potencia y permite el giro del manillar y la horquilla. Está formada por rodamientos.

DH: es una disciplina de Mountain Bike, conocida como DownHill o Descenso.

Enganchón: cuando dos o más ciclistas se enganchan, generalmente por el manillar, dando lugar a una posible y dolorosa caída.

EPO: su nombre técnico es “eritropoyetina” y la produce el organismo. Sin embargo, la utilización de una variante sintética se persigue sin éxito desde hace años en los controles de dopaje. Aumenta los glóbulos rojos y la oxigenación de la sangre.

Escalador: ciclista con gran capacidad para subir puertos.

Eslabón: es una pieza independiente que, junto con más eslabones, componen la cadena.

Farolillo rojo: último corredor de una clasificación general. El origen de esta expresión está en los primeros Tour de Francia, cuando los últimos ciclistas solían llegar por la noche cuando se encendían los faroles.

Flaca: nombre coloquial que se le da a la bicicleta de montaña.

Fondo: cantidad de sufrimiento que puedes aguantar sobre una bici, que suele ser más o menos proporcional a la horas de entrenamiento que has hecho.

Frenos de disco: frenos que funcionan friccionando un disco montado sobre el buje, en lugar del que se monta en la horquilla y roza con la llanta.

Frenos en V: frenos que funcionan friccionando la llanta mediante unas zapatas montadas en los mismos.

Gallo/s: corredores destacados, figuras especiales o líderes del equipo ciclista.

Globero: adjetivo con el que se identifica a los novatos, aficionados ocasionales o principiantes en el mundo del ciclismo, a veces puede ser despectivo.

Hacer la goma: acción de un ciclista cuando se aleja y se acerca de un grupo continuamente a modo de reenganchase.

Hacer un recto: acción de cometer un error en una curva y salirse de la misma en línea recta.

Hierro: cuando se da todo encima de la bicicleta, sin mirar atrás y mordiendo el manillar.

Hueco (abrir): aumento de la distancia de un escapado, con respecto al grupo.

Lanzador: corredor que prepara el sprint de un compañero con más posibilidades que él, al que lleva pegado a su rueda hasta los metros finales de la carrera, en los que se separa, para que el sprinter intente ganar.

Llantazo: abolladura que recibe la llanta de una bicicleta debido a una piedra, raíz, bache o cualquier otro objeto.

Maillot: palabra francesa que significa ‘camiseta’ en español. Es la parte superior del equipamiento del ciclista.

Manguito: prenda del ciclista de quita y pon, que se utiliza en el maillot corto como extensión de las mangas.

Mina: nombre que reciben las heces de vaca o de cualquier otro animal y que se encuentren en la trayectoria de las bicicletas.

Molinillo: utilizar un desarrollo de plato pequeño con el piñón más grande, para pedalear mucho y no avanzar apenas.

Neutralizar: cuando un grupo de ciclistas alcanza al corredor o corredores que habían escapado en una etapa.

Pájara: cuando un ciclista se queda sin fuerzas para pedalear. La razón suele estar ligara a una deficiente alimentación o hidratación o a la acumulación diaria de esfuerzos no recuperados.

Piano: término que se emplea para pedir al corredor que lleva el ritmo del grupo que lo disminuya, ante la imposibilidad de seguirlo.

Rebufo: vacío que deja un ciclista y que puede aprovechar el que le sigue.

Regular: guardar fuerzas.

Relevo: colaboración de dos o más corredores para mantener el ritmo, normalmente alto, y repartir el gasto de fuerzas.

Rodador: corredor con facilidad para moverse por terrenos llanos y capaz de mover un gran desarrollo con ligereza.

Single Track: camino estrecho por el que solo pueden rodar los ciclistas de uno en uno, y cuanto más rápido mejor.

Sprint: nombre que recibe la llegada en grupo a la meta y en la que los ciclistas más rápidos compiten por la victoria a alta velocidad.

Sprinter: velocista en estado puro, suele reservarse para el final de las etapas llanas, donde es especialista.

Tirón: intento de escapada. Consiste en aumentar el ritmo de forma considerable, temporalmente.

Vampiro: se llama así a los miembros de la UCI que sacan sangre a los corredores a primera hora de la mañana, para detectar sustancias dopantes o para garantizar su buen estado de salud.

Zapata: es la pieza de goma montada sobre las levas de freno que ejercen presión sobre las llantas y frena el movimiento de la rueda.

Con todo esto ya podemos tener un vocabulario básico como ciclistas. Hay muchas más palabras relacionadas con el ciclismo, si conocéis alguna interesante no dudéis en comentar y compartirlo con los demás!

Bike Friendly, salir a tomar algo con nuestra bici

Las bicis ya forman parte de nuestra vida, inundan las ciudades, son un modo de vida. Nuestra bici no es solo un medio de transporte, sino que nos define y habla de nosotros.

Se ha convertido en un elemento tan importante en nuestra sociedad, que cada vez son más las empresas que las integran, entre otras cosas, en su decoración. Podemos encontrar bares, cafeterías, restaurantes, tiendas… en las que la bici forma parte de su mobiliario de diseño. Y esto es algo que, además, puede fomentar el uso de la bici entre los propios trabajadores y clientes.

En la decoración de estos establecimientos no solo encontramos bicicletas enteras, sino que usan también fotografías, cuadros o pinturas de bicis, mobiliario y utensilios fabricados con sus componentes, etc.
Hemos visto mesas o taburetes hechos con ruedas o cuadros de bicicletas reutilizados, elementos decorativos con luces o cadenas, pedales, etc. El truco está en la originalidad y que llame la atención del público.

Además, hay que hablar de la importancia que tiene este tipo de decoración, ya que todos los elementos son reciclados y reutilizados. Normalmente son bicis viejas que han quedado en desuso o que ya no funcionaban, y ahora se adecentan y se les da un uso diferente y original. No hay por qué tirar nada, todo se puede reutilizar.

Pero esto no es todo, no solo nos quedamos en una simple decoración, sino que cada vez son más los bares que se unen a lo que se conoce como “Bike Friendly”.

¿Qué es Bike Friendly?

Consiste básicamente en poder entrar a un local con tu bicicleta, sin tener que dejarla en casa o aparcada en la calle, ahora también puede entrar con nosotros.

Esto es algo muy positivo, ya que además de estar rodeados de bicis como parte del mobiliario o de la decoración, a los ciclistas nos gusta poder entrar dentro de este establecimiento con nuestra bici, tenerla al lado y así estar tranquilos y evitar robos o disgustos por tener que dejarla aparcada en la calle.

En Barcelona es donde podemos encontrar más establecimientos Bike Friendly, como por ejemplo El ciclista, donde se puede disfrutar de música en directo, monólogos o improvisaciones teatrales; o el Toma Café en Madrid.

Como respuesta a este nuevo movimiento que ha empezado a ponerse de moda, surgió Fixed Lover, un localizador de locales Bike Friendly, que permitan la entrada a nuestras bicis. Por ahora, la mayoría se encuentran en Barcelona, pero poco a poco se van uniendo locales de otras ciudades, como Madrid, Valencia o Málaga.
Quieren crear también una app para móvi, para que se puedan localizar los distintos bares o cafés desde cualquier punto en el que nos encontremos.

Con estas acciones se fomenta el uso de la bicicleta, al poder llevarla con nosotros a donde vayamos sin necesidad de dejarla aparcada en ningún sitio y que puedan robárnosla. Además del buen ambiente que hay en estos establecimientos, en los que podremos conocer a otros amantes de las bicis.

Qué es el drafting o ir a rueda en ciclismo

Hoy desde nuestro comparador de seguros de bicicletas queremos hablar de un término del que seguramente habréis oído hablar  “drafting” o “ir a rueda” relacionado con el mundo del ciclismo, o también conocido como “rebufo” en el mundo del automovilismo.

El drafting en el ciclismo se produce cuando un ciclista se coloca detrás de otro a una distancia muy próxima, con el objetivo de aprovechar la succión generada por el ciclista que va delante, generando así una menor resistencia de avance, ya que el primer ciclista corta el viento al segundo. Esto hace que el que va detrás pueda generar más velocidad o un esfuerzo menor llevando la misma velocidad que el de delante.

Esta práctica se suele realizar en carreras ciclistas, pruebas contrarreloj o en triatlón, en la parte de ciclismo. Aunque en esta última no siempre está permitido, solo en algunos triatlones populares, pero está prohibido en distancias largas o Ironman.

Es una técnica que muchas personas desconocen y que se puede emplear también en las salidas diarias, rutas, escapadas en bici, etc.

El ciclismo es un deporte en el que hay que luchar contra tres resistencias: la fuerza gravitatoria, fuerza aerodinámica y el rozamiento. Cada una dependerá del terreno por el que vayamos, pero el drafting nos puede ayudar bastante, sobre todo para reducir nuestro gasto energético y tener un mejor rendimiento.

Si vemos los datos en porcentajes, resulta asombrosa la cantidad de energía que podemos ahorrar al ir a rueda con otros ciclistas. Por ejemplo, rodando en llano a rueda con otro corredor, se llega a ahorrar hasta el 26%, si se hace lo mismo pero dentro de un grupo numeroso de ciclistas se puede ahorrar hasta el 39%. Por eso, cuando los ciclistas van en grupo, los que van tirando por fuera sufren un desgaste mucho mayor que los que van dentro, y mayor será el desgaste cuanto más aumente su velocidad.

Por el contrario, si la carretera es empinada, la proporción es inversa, es decir, cuanto mayor sea el desnivel de subida, menos ventajas tiene el ir a rueda. Cobra importancia en esta situación el plano psicológico, ya que al tener como referencia a un ciclista delante, nos hace querer subir un poco más rápido, por eso es importante ir siempre rodeado de un buen grupo.
Para esto es muy importante aprender bien la técnica, porque si vamos en grupo podremos causar un accidente en el que más de un ciclista saldrá perjudicado, además de nosotros mismos.

Si vamos nosotros delante, debemos saber:

  • Mantener la trazada recta, sin hacer eses.
  • Mantener el ritmo. Podemos ayudarnos de un cuentakilómetros.
  • Avisar siempre que vayamos a hacer algún movimiento diferente o brusco, o cuando vayamos a bajar el ritmo.
  • Señalizar obstáculos del suelo. Los que van detrás no pueden ver lo que hay en el suelo, por lo que debemos avisar en todo momento si hay algún tipo de obstáculo, agujeros o baches.

Si vamos a rueda con el ciclista de delante debemos:

  • Colocarnos en el mejor sitio para que no nos dé el aire, en la posición correcta. La posición no tiene por qué ser siempre justo detrás del otro ciclista, sino que dependiendo de la dirección del viento, nos podremos colocar un poco en paralelo, en un lateral…
  • Mantener la distancia. Hay que ir cerca pero tampoco excesivamente pegados. Tampoco lo contrario, ir muy despegados porque no aprovecharemos el rebufo del ciclista de delante.
  • Mantener la trazada, como el ciclista que va delante, sin hacer eses.
  • Estar siempre atento, por si el compañero de delante se le pasa señalizar algún cambio de velocidad, movimiento u obstáculo, es importante estar alerta para que no haya ninguna caída o accidente.

Historia de la Vuelta a España (parte II)

Continuamos con la Historia de la Vuelta Ciclista a España, a falta de unos días para que comience de nuevo.

En el año 1980 se proclamó campeón el joven Faustino Rupérez. Fue un año en el que llegaron muchos corredores nuevos. Fue una época en la que la popularidad de esta prueba aumentó considerablemente.

Dos años más tarde hubo un hecho que distorsionó la imagen de la Vuelta, y es que por primera vez se descalificó y desposeyó de un título a un ciclista en esta prueba por causas de dopaje.
Dos días después de que terminara la competición, Ángel Arroyo, junto con otros ciclistas, fue descalificado por dar positivo. A pesar de la solicitud del contraanálisis, volvió a dar positivo.

El año siguiente apareció el final de etapa en los Lagos de Covadonga, que se convirtió, con el paso de los años, en la subida más emblemática de la Vuelta a España. En esta edición volvió a ganar Hinault, consiguiendo su segunda Vuelta.

La Vuelta a España, además, se vio reforzada por la emisión en directo de las etapas en la televisión pública, era la primera vez que se hacía y esto hizo que cobrara un mayor protagonismo.

La edición de 1984 fue más triste para los españoles, que vieron como el francés Eric Caritoux, hasta entonces desconocido, le arrebataba el título al español Alberto Fernández por tanto solo 6 segundos. Fernández era un ciclista muy querido por toda la afición española.

A partir de 1987, con la victoria del colombiano Lucho Herrera, comenzó el auge del ciclismo de este país, que presentó un fuerte dominio sobre todo en las etapas de montaña.

El español Pedro Delgado consiguió ganar por segunda vez la Vuelta en 1989. Un ciclista también muy importante en el panorama español y muy querido por la afición, que lo llamaban cariñosamente ‘Perico’.

La primera mitad de los años 90 estuvo marcada por un claro dominio del ciclista suizo Tony Rominger, que consiguió ganar 3 veces la carrera de forma consecutiva.

En 1995 hubo un cambio de fechas de la prueba, que pasó a disputarse en el mes de septiembre, cerca ya del final de temporada. En este mismo año, el ciclista Laurent Jalabert consiguió vencer en todas las clasificaciones, algo que nadie ha logrado nunca en la Vuelta a España.

Por fin, en 1998, tras 6 años de victorias foráneas, consiguió el título un español, Abraham Olano, considerado entonces como el sucesor de Indurain.

En 1999, por primera vez en la historia de esta competición, el inicio se encontraba en una ciudad extranjera, en este caso Lisboa, por primera vez la prueba tenia comienzo fuera del territorio nacional, y fue algo que atrajo también a muchos espectadores de otros países.

Las primeras ediciones de los años 2000 estuvieron marcadas por el dominio del español Roberto Heras, que consiguió ganar en 3 ocasiones, e incluso en 2005 también ganó, pero fue descalificado debido a un control antidopaje en el que dio positivo por consumo de EPO, por lo que fue desposeído de su cuarto título.

En 2002, la Vuelta terminó su recorrido en el estadio Santiago Bernabéu, que cumplía un siglo de historia.

Comenzaban a destacar figuras del ciclismo más recientes como Alberto Contador, Alejandro Valverde y Oscar Pereiro.

En 2008 Alberto Contador consiguió ganar la Vuelta a España, y ese mismo año ganó también el Giro de Italia. Se convirtió en el primer español en ganar las 3 “Grandes Vueltas”. Ganaría de nuevo la Vuelta, años más tarde en 2012.

Alejandro Valverde se impuso como líder en el año 2009.

El año pasado el ganador fue Chris Horner, y este año estamos a la espera de ver quién será el próximo campeón de esta Gran Vuelta Ciclista a España.

¿Quién crees que ganará?